Desde mucho tiempo atrás se estableció un debate acerca del empleo que se le debe dar a la información que está contenida en internet, y sobre todo de la posición que se debe de asumir al “consumirla”, es un hecho que en internet encontramos información de las más diversas temáticas y representativa de las más variadas concepciones filosóficas, religiosas, políticas, entre otras, es por ello que desde un tiempo acá se aboga por un uso consiente y crítico de este recurso.
En ocasiones podemos encontrar cursos online en los que se emplean recursos obtenidos de internet, imágenes, videos, textos, alocuciones, en los que se expresan ideas divergentes acerca del tema que se aborda en la temática del curso, esto ocasiona que el contenido sea incongruente, no es tomar de acá y de allá sin una lógica y una coherencia con los sustentos que asume el autor, desdichadamente esto ocurre con más frecuencia de la que debiera. Este fenómeno ya ha sido declarado y señalado en distintos materiales por autores de diversos países, por lo que se puede declarar que existe esta situación problemática y que seguida por la comunidad.
Mucho tiempo atrás en el mundo de las artes, y en especial en el de las exposiciones artísticas, existe la función del comisariado artístico, esta responsabilidad es más conocida por el término latino-inglés curator (la traducción directa es «cuidador», aunque existen en el DRAE la palabras «curador» y «curaduría», con varias acepciones), o el término más tradicional de conservador (también polisémico), que no debe confundirse con las funciones de conservación y restauración de obras de arte.
La función del curator es propia de la museística, las exposiciones artísticas y el coleccionismo de arte, surge a partir de la idea de un conservador de arte, por lo que debe de ser un profesional capacitado en el conjunto de saberes que posibilitan entre otros la exposición, valoración, manejo, preservación y administración de bienes artísticos. Este profesional es un agente activo en el ejercicio de los valores estéticos, formado principalmente, aunque no exclusivamente, en historia del arte y estética, actúa generalmente sobre los bienes artísticos, así como también participando en labores de administración y conducción, sin dejar de lado la elaboración de estudios y la investigación.
Recientemente ha aparecido el término “curación de contenidos” para referirse a una serie de procedimientos mediante los cuales se filtra y selecciona el mejor contenido de acuerdo a ciertos parámetros que determinemos, siendo una tarea realizada con bastante frecuencia en la actualidad debido a la gran cantidad de contenido que encontramos en Internet. En otras palabras, intenta establecer una vía para adoptar una posición crítica al seleccionar de la información disponible en Internet que se asume para emplear en el desarrollo de los procesos Educativos Formativos.
Entre los autores que han abordado el tema hemos realizado un análisis de los momentos que declaran que se deben de realizar, y exponemos la siguiente secuencia:
Este proceso, la curación de los contenidos, permite obtener contenidos de mejor calidad para el desarrollo de cursos online, así como asumir una posición más consiente del empleo de los recursos disponibles en internet para el desarrollo de los proceso Educativos Formativos.
En cierta ocasión participaba en un debate acerca de la diferencia entre la Sociedad de la Información y la Sociedad del Conocimiento, en la segunda se promueve el empleo crítico y consiente de los recursos de internet para adoptar una posición coherente para su empleo de forma constructiva, esto es precisamente lo que aborda el tema de la curación de los contenidos, un llamado a un análisis cada día más profundo de la información que tomamos de la red de redes para emplearla en nuestros cursos.
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